La inflamación de la próstata es una enfermedad masculina común y bastante grave. Las causas de la enfermedad, los síntomas principales y los métodos de tratamiento: todo esto que necesita saber para ver a un médico a tiempo.
¿Cómo se manifiesta la prostatitis?
Desafortunadamente, muchas enfermedades no abandonan a la humanidad, a pesar del desarrollo de la medicina y del hecho de que tenemos un arsenal de medicamentos de varios tipos (antivirales, antibacterianos, etc. ) que está lejos de ser pequeño.
Tales dolencias incluyen inflamación de la glándula prostática: prostatitis.
Muchos hombres ni siquiera sospechan que tienen una forma de prostatitis crónica y lenta, casi asintomática, en el artículo encontrará síntomas de cómo se manifiesta la prostatitis y formas de curarla.
Muchos hombres se enfrentan a esta enfermedad, tanto en la juventud como en la edad adulta.
Con una próstata inflamada, los hombres experimentan no solo molestias, sino también dolor al orinar y eyacular (lo que por sí solo dificulta mantener una vida sexual plena). Y lo más importante: si no acude a un especialista a tiempo, puede tener graves consecuencias.
Causas de la prostatitis
El estilo de vida que lleva una persona siempre afecta su salud, y la mencionada enfermedad no es la excepción.
Enumeramos los factores que posteriormente pueden "familiarizar" a los hombres con la prostatitis:
- promiscuidad, actividad o abstinencia prolongada;
- enfermedades urológicas transferidas;
- enfermedades de transmisión sexual (tricomoniasis, gonorrea);
- procesos inflamatorios de un plan crónico o infecciones crónicas;
- estreñimiento frecuente;
- hipotermia del cuerpo;
- trabajo sedentario;
- inmunidad reducida;
- estilo de vida sedentario.
Conociendo los factores anteriores, puede protegerse de la enfermedad simplemente comenzando a practicar deportes, siguiendo una dieta equilibrada (al mismo tiempo, si es posible, excluya el uso de alcohol, grasas, picantes), observando el modo de vigilia y descansar.
¿Por qué es peligrosa la prostatitis?
Un órgano tan pequeño como la próstata (un saco muscular ubicado en la pelvis pequeña y que rodea el conducto deferente y la uretra por todos lados) juega un papel muy importante en el cuerpo masculino y realiza muchas funciones:
- responsable de la síntesis de testosterona;
- produce jugo prostático (la base del esperma);
- es una válvula para bloquear la salida de la vejiga durante una erección;
- responsable de la agradable sensación del orgasmo.
Después de enumerar estas funciones, la salida se sugiere a sí misma:
- la prostatitis implica disfunción eréctil;
- reduce la actividad de los espermatozoides: esta es una condición importante para la fertilización;
- interrumpe el proceso de orinar;
- reduce la inmunidad de la próstata;
- reduce la sexualidad masculina y conlleva muchos otros trastornos y enfermedades que reducen la calidad de vida humana.
Signos de prostatitis
La prostatitis tiene la propiedad de desarrollarse repentinamente, teniendo la apariencia de una enfermedad inflamatoria aguda con los síntomas correspondientes:
- fiebre, fiebre, fiebre,
- dolores cortantes en el ano, perineo, detrás del pubis,
- dolor al orinar y defecar.
Aunque la mayoría de las veces la enfermedad se desarrolla de forma crónica, y los síntomas anteriores no se pronunciarán.
Todos estos síntomas dan motivo de preocupación y buscan atención médica.
Posteriormente, el especialista prescribe una serie de exploraciones para un mayor diagnóstico de la enfermedad y su posible tratamiento.
Directamente para establecer el diagnóstico, son necesarias las siguientes pruebas:
- síntomas;
- Ultrasonido de la próstata;
- análisis generales de sangre, orina;
- química de la sangre;
- muestras microbiológicas de la porción media de la orina;
- análisis de secreciones de orina y otras pruebas a criterio del especialista.
Tratamiento de la glándula prostática en hombres.
En cuanto al tratamiento de la prostatitis, depende de su forma y curso. Los antibióticos se usan para tratar la prostatitis bacteriana aguda.
Pero, antes de prescribir el medicamento, el médico debe prescribir un cultivo bacteriano de la secreción prostática para determinar directamente la sensibilidad de la flora para elegir el medicamento adecuado.
Muy a menudo, los antibióticos se usan para esta forma de la enfermedad.
En el tratamiento de la forma bacteriana en curso crónico se utilizan los mismos métodos que en la prostatitis bacteriana aguda, con la única diferencia de que el tratamiento tiene un período más prolongado.
Es necesario eliminar por completo el foco de inflamación, normalizar el estado inmunológico y, si es posible, restaurar las funciones de la próstata.
Con la prostatitis inflamatoria asintomática, también se prescribe terapia con antibióticos. Curiosamente, esta forma de la enfermedad suele diagnosticarse al establecer la causa de la infertilidad o durante el examen del paciente por cáncer de próstata.
Con la terapia antibacteriana, siempre se recetan medicamentos que mantendrán la microflora normal del cuerpo (todo tipo de probióticos), así como vitaminas para restaurar y fortalecer el sistema inmunológico.
Además, en el tratamiento de la prostatitis, se prescribe fisioterapia (ultrasonidos, enemas con aguas minerales, compresas de barro), masaje directo de la glándula prostática (está prohibido realizarlo en el curso agudo de la enfermedad, así como en presencia de hemorroides y con fisuras rectales).
Estos procedimientos, aunque desagradables, son muy efectivos porque contribuyen a la salida del líquido estancado, restauran el flujo sanguíneo normal en la glándula inflamada y aceleran el proceso de curación.
Desafortunadamente, con la prostatitis crónica avanzada, cuando se produce un absceso de la próstata, un adenoma de próstata o un estrechamiento de la uretra, se realiza una intervención quirúrgica.